La salsa con tomate es uno de los pilares de la cocina, presente en platos emblemáticos de México, Colombia, Chile, Costa Rica, Guatemala, Italia y muchos otros; con preparaciones como chilaquiles, enchiladas, arroz con tomate, huevos rancheros etc.
Sin embargo, a veces es necesario salir de la rutina y sorprender a tus comensales con nuevas combinaciones y sabores. Con unos pequeños cambios, puedes darle un giro creativo a la clásica salsa roja y crear opciones innovadoras que despierten los paladares.
15 salsas con tomate del mundo para inspirarte
En este artículo, te presentamos 15 salsas internacionales partiendo de la base de una salsa con tomate, con influencias que recorren las cocinas del mundo. ¡Inspírate y prueba nuevas versiones de la salsa que ya es favorita en tu restaurante!
Hogao
El hogao es una salsa tradicional colombiana que parte de una base con tomate, cebolla y ajo. Lo que distingue al hogao es su proceso de cocción a fuego lento, lo que le permite desarrollar un sabor dulce y suave. Además, se le suele añadir cilantro fresco para un toque final.
Puedes utilizar el hogao para acompañar platos de carnes asadas, con huevos, patacones entre otros. Su textura espesa y su sabor intenso lo hacen perfecto para desayunos contundentes.
Salsa marinara
La salsa marinara es una de las salsas más populares en Italia, utilizada principalmente para pastas, pizzas o mariscos. Parte de una base con tomate cocido a fuego lento con ajo, cebolla, albahaca y orégano. Puedes darle un toque especial añadiendo un chorrito de vino blanco para mayor profundidad.
Puedes usarlas en pastas, pizzas, arroces, con albóndigas de carne o pollo, o como acompañamiento para entradas como calamares fritos, bastones de mozzarella.
Salsa ranchera
A diferencia de la salsa con tomate, la salsa ranchera incorpora ingredientes como chiles serranos, ajo y cebolla, dándole un toque picante y más robusto.
Seguramente la utilices en los chilaquiles, huevos, quesadillas o tacos. Pero ¿qué dices de pastas o una pizza de estilo mexicano con salsa ranchera? También piensa en unos camarones rancheros –en vez de a la diabla– o incorpórala en tus sánduches.
¿Cómo mejorarla? Añade un toque ahumado usando chiles secos como el chipotle o chile de árbol asado en comal. También puedes incluir un poco de vinagre para darle acidez y balance.
Salsa harissa
La harissa es una salsa picante originaria del norte de África que combina tomate con chiles rojos, ajo y una mezcla de especias como comino y cilantro. Su sabor es intenso, con un equilibrio perfecto entre picante y especiado, lo que la hace ideal para aquellos que buscan algo más intenso.
Utiliza la harissa como aderezo para carnes asadas, o agrégala a guisados de res o cordero para darle un toque exótico.
Chutney con tomate
El chutney con tomate es una opción ideal para aquellos que buscan un sabor diferente, combinando lo dulce y lo picante en una misma salsa. En la cocina india, se utiliza tomate cocido junto con especias como el comino, cilantro, jengibre y azúcar morena. El resultado es una salsa espesa y agridulce, perfecta para acompañar carnes o panes planos como el naan.
Puedes servir el chutney con tomate como acompañamiento de platos fritos o como parte de una tabla de quesos. También es excelente con pollo a la parrilla o como aderezo para hamburguesas.
Salsa Choron
La salsa Choron es una variación de la clásica salsa bearnesa francesa, a la que se le añade una base con tomate para darle un sabor más profundo y complejo. Esta salsa se elabora con yemas de huevo, mantequilla, vinagre de estragón y un toque de puré con tomate.
Esta salsa es perfecta para elevar cortes de carne, especialmente filetes y solomillos. También puede ser una excelente opción para acompañar vegetales a la parrilla o pescados grasos como el salmón.
Salsa putanesca
La salsa putanesca es famosa por su sabor atrevido, ya que combina tomate con alcaparras, aceitunas negras, ajo, anchoas y peperoncino. Esta mezcla produce una salsa rica, salada y ligeramente picante, que se usa comúnmente para pastas, pero que puede ser un excelente acompañamiento para carnes blancas o mariscos.
Puedes usar la salsa putanesca como aderezo para pescados a la plancha, o incluso para darle un giro creativo a una pizza o bruschetta.
Salsa molcajete
Sabes que la salsa molcajete es una preparación mexicana rústica donde los ingredientes (tomate, chile, cebolla y ajo) son asados y luego molidos en un molcajete. Pero quizás no estés aprovechando todo el potencial de salsa con una textura gruesa y un sabor ahumado característico.
Incorpora ingredientes inusuales como piña asada o mango para añadir un toque dulce que contraste con el picante. También puedes probar con diferentes tipos de chile, como el pasilla o el habanero, según el nivel de picor que desees.
Salsa amatriciana
La salsa amatriciana es otra preparación típica italiana, que utiliza guanciale (o panceta), tomates y queso pecorino. Su sabor es profundo, gracias a la combinación de los ingredientes grasos con la acidez del tomate. Puedes adaptarla con ingredientes locales, usando tocino o chorizo en lugar de guanciale, y por cualquier queso curado hecho con leche de oveja.
Ideal para platos de pasta, pero también puede ser una excelente opción para acompañar costillas de cerdo o alitas de pollo con un toque italiano.
Salsa arrabiata
La salsa arrabiata es otra variación italiana que añade un toque picante a la clásica salsa con tomate. Se elabora con ajo, tomates y chiles secos, lo que le da un sabor fuerte y picante, ideal para aquellos que disfrutan de sabores intensos.
Es una salsa ideal para pastas, pero también puedes usarla para preparar albóndigas o como dip para papas fritas o vegetales asados.
Mojo picón
El mojo picón es una salsa muy popular en las Islas Canarias. Se elabora con una base con tomates, ajo, pimientos rojos secos (en general, ñoras), comino y vinagre, resultando en una salsa de textura espesa y con un sabor ahumado y ligeramente picante.
El mojo picón es perfecto para acompañar papas asadas o fritas (papas arrugadas), carnes a la parrilla, o incluso como aderezo para verduras asadas. Su sabor ahumado puede darles un toque único a platillos típicos. Para reemplazar las ñoras piensa en los pimientos piquillo.
Tomato relish
El tomato relish es una salsa agridulce muy popular en Australia, que se utiliza como acompañamiento para carnes a la parrilla, sándwiches y hamburguesas. Se prepara con tomates, cebolla, azúcar, vinagre y especias como mostaza y jengibre, lo que le da un sabor ligeramente dulce con un toque picante.
Puedes ofrecer el tomato relish como acompañamiento para hamburguesas, costillas, o como parte de un menú de carnes asadas. También es perfecto como dip para papas fritas o panes.
Salsa Rougaille
¿Has oído hablar de esta salsa? Es un clásico de la isla de Mauricio y otras islas del océano Índico. La salsa Rougaille se prepara con tomates, cebolla, ajo, jengibre y especias como el tomillo y el chile. A veces se le añade carne, salchichas o mariscos para hacerla un plato completo, pero también se usa como salsa versátil para acompañar arroz o pan.
La salsa rougaille es ideal para acompañar pescados o mariscos a la parrilla. También puedes utilizarla como una opción diferente para platos de pollo o cerdo, dándole un toque exótico y especiado.
Lecsó
El lecsó es una salsa húngara que combina tomates, pimientos y cebollas, cocidos lentamente en aceite o manteca. Se trata de un sofrito que se puede comer solo o con huevos, salchichas, o arroz. La combinación de vegetales hace que esta salsa sea jugosa y muy sabrosa.
Ofrece el lecsó como acompañamiento para carnes asadas o como base para guisos. También puedes aprovecharlo para preparar tus desayunos.
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