Servicio de alimentación de alto nivel va más allá de la simple preparación, también debe tener como objetivo crear un plato equilibrado que no solo sea capaz de saciarnos, sino también de nutrir nuestro cuerpo y mente de manera completa. En este contexto, es necesaria una guía que, además de definir qué es un plato equilibrado, indique cuáles son los principales factores para considerar al momento de crear una receta. Este artículo te ayudará a conocerlo.
Profundicemos en las estrategias y consejos de nuestra nutricionista, Eliane Moreira. Desde el diseño del plato hasta las herramientas que debemos considerar, te enseñaremos a crear recetas nutritivas y equilibradas.
¿Qué es un plato equilibrado?
Antes de pensar en cómo preparar una comida nutritiva, es importante entender lo que realmente significa. Según la nutricionista, un plato equilibrado es aquel que incluye todos los nutrientes para mantener una dieta diversa y saludable. Un establecimiento de comida puede "ser responsable de proporcionar alimentos que contribuyan a mejorar el estado de ánimo, mejorar la autoestima, reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la calidad del sueño y prevenir una serie de enfermedades", señala. Por lo tanto, no hay que subestimar el poder de la alimentación en una sociedad cada vez más preocupada por el bienestar y la calidad de vida en general. Al asumir esta responsabilidad, algo que está en tendencia, tu negocio puede atraer clientes conscientes y fidelizarlos.
¿Cómo debe ser un plato equilibrado?
Un plato nutritivo "está compuesto por ingredientes capaces de aportar todos los nutrientes esenciales para el funcionamiento saludable del organismo, para ello es fundamental que contenga carbohidratos, proteínas, vitaminas, grasas, fibras y minerales de forma sostenible y dirigida a las necesidades individuales", afirma Eliane. Entonces, exploremos más a fondo qué son estos elementos y cuáles son sus beneficios.
Proteínas
Las proteínas desempeñan un papel vital en la construcción y el mantenimiento de los tejidos corporales, incluidos los músculos, la piel y el cabello. Además, son esenciales para la producción de enzimas y hormonas que regulan diversas funciones corporales. Al incorporar fuentes variadas de proteína (carnes, lácteos, legumbres/granos y cereales), la preparación gana consistencia y provoca saciedad, lo que impide que sigamos comiendo más de lo que debemos.
Carbohidratos
A pesar de que las dietas bajas en carbohidratos están a la moda, estos nutrientes siguen desempeñando un papel esencial en aquellos que buscan un plato equilibrado. Sin embargo, Eliane Moreira destaca la importancia de elegir los carbohidratos adecuados: "preferiblemente carbohidratos sin refinar: arroz integral, arroz negro, quinoa y otras verduras como algunos tubérculos”. Los carbohidratos aportan energía para el funcionamiento del organismo; además, los alimentos sin refinar, como los cereales integrales y los tubérculos, contienen fibra y otros componentes que se liberan gradualmente en el cuerpo, proporcionando energía sostenida y previniendo los picos de glucosa en la sangre.
Vitaminas y fibra
Las verduras proporcionan micronutrientes esenciales que contribuyen a diversas funciones corporales, como la salud inmunológica, la regulación metabólica y la salud ósea. La fibra presente en las verduras también es fundamental para la salud digestiva y la sensación de saciedad. Al crear platos equilibrados con una variedad de verduras, nutrimos nuestro cuerpo con nutrientes vitales que contribuyen a mejorar la salud a largo plazo. La nutricionista también agrega que las frutas son bienvenidas para armar una receta nutritiva, ya sea que se usen en ensaladas o en postres, ya que son una gran fuente de vitaminas, minerales y fibra.
Grasas saludables
Parece que las grasas siempre son las villanas en un menú nutritivo, pero en realidad pueden ser grandes aliadas. "La presencia de grasas de fuentes saludables, como el aguacate, el coco, el pescado, el aceite de oliva, la linaza, los frutos secos, las semillas de chía y la carne es importante, ya que algunas vitaminas son solubles en grasas, tales como las vitaminas A, D, E y K", dice Eliane. Incorporar fuentes saludables de grasa también es una forma de realzar el sabor y de contribuir a la nutrición de los clientes. Realmente, lo más importante a considerar cuando incluimos grasas en un plato, es la cantidad que utilizamos.
Aprendimos de Eliane Moreira que construir un plato equilibrado no se trata solo
de los tipos de alimentos, sino también de cómo los organizamos. Nos anima a pensar en proporciones estratégicas a la hora de armar nuestras recetas. El enfoque sugerido es dividir el plato en tres partes: la mitad para los alimentos ricos en vitaminas, minerales y fibra, tales como verduras, legumbres y frutas; y la otra mitad dividida a partes iguales entre proteínas y carbohidratos. Esta cuidadosa proporción no solo garantiza un suministro equilibrado de nutrientes, sino que también contribuye a la sensación de saciedad y a una función metabólica adecuada. Por lo tanto, exploremos una amplia gama de alimentos. Hay otros alimentos que no fueron mencionados pero que se pueden incorporar a la preparación, siempre y cuando haya un equilibrio con los ingredientes de mayor valor nutricional. Al fin y al cabo, la comida que es buena para ti es también la que te genera comodidad y placer.
Para que esto se haga de forma organizada en tu negocio, asegúrate de utilizar recursos profesionales de estandarización y calidad, como la ficha técnica. Sé creativo y elige ingredientes esenciales para que el menú sea nutritivo, variado y delicioso.
Personalización para diversas necesidades dietéticas
Hasta ahora, hemos hablado de manera muy general sobre las necesidades nutricionales de las personas y la construcción de un plato equilibrado, pero además de buscar la moderación y el equilibrio, es fundamental tener en cuenta las necesidades nutricionales de cada persona y de algunos grupos sociales. La nutricionista hace hincapié en la necesidad de ofrecer opciones personalizadas para clientes con restricciones dietéticas, como intolerancias al gluten o a la lactosa o vegetarianos y veganos, por ejemplo. Esta actitud demuestra un compromiso con la satisfacción de las diversas necesidades, asegurando que todos puedan disfrutar de un plato equilibrado que satisfaga sus necesidades nutricionales específicas. La personalización no solo promueve una experiencia gastronómica inclusiva, sino que también refuerza la idea de que la alimentación saludable se puede adaptar a una variedad de estilos de vida y preferencias individuales.